Cuando extraes sal marina, flor de sal o escamas de sal en una salina artesanal, como hacemos nosotros, todo el proceso se realiza a mano, desde su extracción hasta su secado y envasado. Al no utilizar maquinaria industrial sino instrumentos de madera como la "vara" o "la azada o el azadón" la sal sale blanquita como su propio color natural y contiene todos los oligoelementos propios del agua de mar, ya que se recoge con la previa evaporación del agua de mar, produciéndose el proceso de cristalización, secándose con el viento y el sol de la bahía de Cádiz.
La sal marina natural y artesanal tiene como componente principal el cloruro sódico (86%), aunque cuenta también con otros minerales como manganeso, yodo, potasio, silicio, calcio, fósforo y magnesio, en concreto nuestra sal tiene un alto contenido en magnesio, estos oligoelementos son muy beneficiosos para la salud.
La sal industrial, en cambio, es la que por norma general se vende en la mayoría de los supermercados, es cogida en salinas industriales por grandes maquinarias, por lo tanto, sale manchada muchas veces de polvo y fango y se refina. Se le vierten una serie de químicos para que la sal quede de color blanco, por ello pierde buena parte de todos los componentes buenos "oligoelementos" que hemos nombrado más arriba, pasando el cloruro sódico a ocupar entre el 97% y el 99% de su composición. Por este motivo sus beneficios para la salud son notablemente menores.
El mayor y más variado contenido en minerales de la sal natural marina favorece la homeostasis del organismo humano, es decir, la sinergia en los procesos fisiológicos. La sal marina propicia que la bomba sodio-potasio de nuestras células mantenga un adecuado equilibrio en nuestras células, algo esencial para la vida.
De igual modo, los cristales que conforman la sal marina natural son de menor tamaño que los de la sal refinada, por lo que nuestro organismo los asimila mejor.
¿Por qué necesitamos sal natural en nuestra dieta?
Aunque la sal nunca debe consumirse en exceso (la moderación y el equilibrio siempre debe primar en nuestra alimentación) es un error eliminar la sal natural de nuestra dieta por diversas razones:
- Es fundamental para la los fluidos extracelulares y linfáticos, para el plasma sanguíneo y para el líquido amniótico.
- Regula la presión arterial y el nivel de azúcar en sangre.
- El intercambio iónico de potasio-sodio favorece la comunicación entre el cerebro y los músculos.
- Es básica para generar energía hidroeléctrica en las células del organismo.
- Ejerce un control del balance del ácido básico metabólico.
- Favorece la absorción de nutrientes en el tracto intestinal.
- Es un antihistamínico natural.